El Peronismo, industria nacional y el caso Siam

Se dictó en el marco del ciclo de charlas culturales “A 75 años del 17 de Octubre”.  

El martes 20 de octubre se desarrolló el segundo encuentro del ciclo de charlas historiográficas “A 75 años del 17 de Octubre”, organizado por la Secretaría de Cultura y Extensión Universitaria de la Facultad Regional Avellaneda de la Universidad Tecnológica Nacional, conjuntamente con la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV), la Junta de Estudios Históricos de Avellaneda, la Junta de Estudios Históricos de Barracas, la Junta de Estudios Históricos de Barracas al Sud y la Asociación de Historia Oral de Avellaneda.

“El Peronismo, la industria nacional y el caso Siam” fue el título de la charla, que estuvo a cargo de Alejandro Espinosa Arnau (Profesor en la Escuela Técnica Torcuato Di Tella y ayudante en la materia Historia del Diseño en la UNDAV) y de José Villa (Miembro de la Comisión Interna del personal de la fábrica SIAT, ex Siam).

“El 17 de octubre es una fecha sustancial, especialmente para la UTN, nacida como Universidad Obrera Nacional. Estas charlas históricas son de gran valía, sobre todo para los más jóvenes. Muchos tal vez crean que Siam ya no existe, de ahí la importancia de estas actividades”, expresó durante la apertura el Decano de la UTN Avellaneda, Ing. Jorge Omar Del Gener. “Muchas gracias a la UNDAV y a las juntas de estudios históricos por organizar este encuentro con nosotros”, agregó.

También saludó a los presentes el Rector de la UNDAV, Ing. Jorge Calzoni, quien manifestó que “con la UTN Avellaneda somos instituciones hermanas y la idea es sumarnos a participar porque el 17 de octubre es una historia latente que tenemos que sostener en el tiempo”.

En el mismo sentido, el Secretario de Cultura y Extensión Universitaria de la FRA, Ing. Oscar Lopetegui, agradeció a las instituciones participantes y afirmó que “el aniversario que motiva este encuentro es muy importante para la Argentina”. “Es necesario repensar nuestro país entre toda la comunidad y estar unidos en este contexto tan particular que estamos viviendo”.

Como introducción a la charla tomó la palabra Lucas Yáñez, presidente de la Junta de Estudios Históricos de Barracas. “Lejos de entenderlo como frontera, vemos las dos márgenes del Riachuelo como espacio de unidad, porque a ambos lados hay una población con muchas similitudes y que fue testigo de la movilización popular del 17 de octubre de 1945”, comentó, y sobre el tema de la charla expresó que “la industria en el país existía desde fines del siglo XIX y posteriormente el peronismo le dio un lugar de relevancia a la masa obrera”.

A continuación, la Lic. Carolina Muzi, profesora de Historia del Diseño y de Historia de la Industria Argentina en la UNDAV, resaltó que “Avellaneda tiene una rica historia, vinculada con las distintas etapas industriales por las que ha transitado el país”. Y acerca del trabajo en torno a Siam que viene realizando desde las materias a su cargo en la UNDAV, afirmó: “Perseguimos el objetivo de producir una historiografía propia sobre el pasado industrial y sus vaivenes, que dan identidad al trabajo y al territorio”, y valoró el compromiso de Espinosa Arnau por recuperar la historia de Siam, que incluye una producción de cuadernillos sobre las distintas etapas de la empresa.

Luego, Alejandro Espinosa Arnau inició su disertación comentando que “mi relación con Siam comienza a partir de mi trabajo docente en la Escuela Técnica Di Tella y de mis estudios en la UNDAV, donde empiezo a reunir información e historias sobre la empresa que merecían ser rescatadas”. “Así, fueron surgiendo testimonios poco conocidos del día a día del trabajo de los obreros de Siam, que en muchos casos conformaban un mismo grupo familiar. Ese fue el cauce para preservar la historia oral de esta empresa emblemática, que permite rescatar una visión obrera sobre la industria”, explicó sobre su producción historiográfica.

Acerca de los orígenes de Siam, resaltó que fue fundada por Torcuato Di Tella en 1911, bajo el nombre de Sociedad Industrial de Amasadoras Mecánicas. “Las amasadoras mecánicas fueron el primer producto que se fabricó ya que en 1910 una Ordenanza Municipal prohibió el amasado manual”, describió, y agregó: “Su desarrollo posterior tiene que ver con la fabricación de surtidores de combustible y materiales relacionados con la industria del petróleo”. “Hacia 1930, con la crisis mundial y la sustitución de importaciones, comienza la producción de las heladeras, producto mítico de Siam, que empieza a diversificar su producción”, detalló.

“La empresa se instaló en Avellaneda en 1928, y para la década del 40 ya era una de las más grandes metalmecánicas de Sudamérica. Hacia fines de los ‘50 era una de las cien empresas más importantes del mundo”, relató Espinosa Arnau. “A nivel regional, hubo plantas en Villa Castellino (electrodomésticos), Valentín Alsina (SIAT, Sociedad Industrial Argentina de Tubos) y Villa Diamante, donde se producían las motonetas Siambretta”, recordó, y amplió: “Otra de sus producciones principales fue el automóvil Di Tella 1500, que comenzó a fabricarse en 1962, en Monte Chingolo”.

En cuanto a la capacitación de los trabajadores, el disertante comentó que “en la década del 30 se generó una migración de mano de obra del campo a la ciudad, pero faltaba formación técnica. Torcuato Di Tella trae al país técnicos y operarios italianos, que fueron los primeros trabajadores calificados de Siam. En la década del 40, en la fábrica de Avellaneda, surge una escuela interna de formación de obreros, hecho que se replica en los ‘60 con la creación de una escuela técnica, antecesora de la escuela Torcuato Di Tella. Eran espacios de formación exclusivos para empleados de la empresa y para sus hijos”.

Sobre el declive de la empresa, explicó que se dio a partir de mediados de los años 60, “hasta su liquidación final en 1986”, y que se debió a distintas cuestiones: “La muerte de Torcutato Di Tella en 1948 generó que quedaran sus familiares a cargo, pero sin el mismo ímpetu ni la misma capacidad de conducción. También afectó la situación fluctuante de la economía y la política nacional, acompañado de malas gestiones, ya que se intentaron crecimientos excesivos que no pudieron sostenerse y la empresa empezó a endeudarse. Hacia fines de los años 70 fue intervenida y luego vendida en 1986”.

Posteriormente tomó la palabra José Villa, quien se refirió a la actualidad de la ex Siam, actual Tenaris SIAT, ubicada en Valentín Alsina, y recordó sus inicios allí. “Entré a la empresa en 1987, cuando ya estaba privatizada por el Grupo Techint, que quiso adquirir la planta sin el personal, pero los compañeros que venían de la etapa anterior lograron mantener sus puestos. Así, fuimos aprendiendo a defender nuestro trabajo, sufriendo las consecuencias de la flexibilización laboral de los años 90”, expresó, y destacó “la lucha gremial que llevamos adelante para evitar una mayor precarización”.

“Hacia principios de los 2000, y hasta 2010, logramos ser parte de la Comisión Interna de la empresa y pudimos trabajar sobre la base de todo lo que aprendimos en la primera etapa a partir de la participación de los compañeros en asambleas y debates”, remarcó.

“La idea de Siam como una familia se fue perdiendo con los años. Quedaron algunas enseñanzas de lo que fueron en sus comienzos sus plantas emblemáticas como la de Monte Chingolo, donde trabajó mi padre en los años 60”, recordó. “Hoy recibimos un ataque continuo de parte del grupo empresario, que aprovechó la pandemia para recortar los premios por producción. Estamos en una pelea desigual y compleja, pero la historia de trabajadoras y trabajadores de la empresa nos muestra un camino de lucha y dignidad. Las plantas de Siam fueron un símbolo de la industria nacional y trabajamos cada día para que vuelvan a serlo”, concluyó.

Como cierre, el historiador Enrique Arrosagaray destacó que “Siam fue un baluarte del desarrollo industrial. Su columna obrera fue muy importante para el 17 de octubre de 1945 ya que arrastró a muchos trabajadores de otras empresas de la zona sur”, y remarcó que “en aquella columna obrera de Siam se encontraba entre la multitud una trabajadora muy joven, Azucena Villaflor, creadora del movimiento de Madres de Plaza de Mayo en 1977”.

El encuentro se desarrolló a través de la plataforma Zoom y fue transmitido desde https://www.facebook.com/CulturaYExtensionUTNFRA/